La búsqueda del sentido a la vida y el vacío existencial

En anteriores posts, escribíamos un artículo que llevaba como título "Si vamos a morir, ¿cuál es el sentido de la vida?" Tomamos como relevo estas palabras y hoy reflexionamos porqué a veces sentimos un gran vacío existencial ante la vida, la innata necesidad de buscarle un porqué a todo, un sentido.
A veces, puede que desconectes con el mundo y tengas la sensación de estar cayendo, como Alicia en el País de las Maravillas, a ritmo lento por una madriguera sin fondo. Se le llama vacío existencial.
Ante una meta que no se alcanza, el choque puede ser brutal y doloroso. Aquí empieza a nacer un pequeño pero cálido desierto que abrasa nuestras inquietudes. El peso de las injusticias, la viviencia de duras experiencias, la frustración, la sociedad, la falta de libertad, la muerte... existen tantos factores como motivos para que las personas naveguen por su interior en busca de un porqué que les haga volver a conectar con la realidad.
El ser humano tiene la necesidad de hacer algo con su vida y por el mundo. En busca de esa felicidad, ansía la libertad de su propio desarrollo esquivando los límites, más allá de lo material.
No hay pregunta más complicada que aquella que nos hacemos a nosotros mismos. Sin embargo, es a la vez la más complicada y que nos salva de todos los males que nos atormentan. Es por ello, que hay que saber adoptar una actitud reflexiva que pueda hacernos indagar en nuestro interior, preguntarnos nuestros miedos.
Es importante ser conscientes que en nuestra mano SOLO está el poder cambiar lo que ha ocurrido. El sentido de la vida cambia, tú lo cambias. Cada día tienes la oportunidad de cambiarlo, cada momento es perfecto para dar un paso hacia la felicidad, hacia la búsqueda del yo estable y contento consigo mismo.
El arte de saber fluir en la vida. Lo importante es tener siempre latente la ventaja de saber dejarse llevar, dejar que las cosas fluyan, que éstas lleven su proceso, su tiempo...